Mar. Abr 30th, 2024

En un movimiento sin precedentes que ha generado alarma internacional, la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo en Nicaragua ha impuesto severas condenas a 11 destacados líderes cristianos, sentenciándolos a periodos de entre 12 y 15 años en prisión y exigiéndoles el pago colectivo de 880 millones de dólares. Este castigo sigue a su participación en actividades de oración pública, interpretadas por el gobierno sandinista como una amenaza a su autoridad.

La decisión, anunciada el 19 de marzo, acusa a los líderes de «lavado de dinero», una acusación que organizaciones defensoras de la libertad religiosa, como ADF International, consideran infundada. ADF International ha tomado medidas legales en defensa de los condenados, presentando el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y solicitando intervención para asegurar la protección de la salud, vida e integridad de los afectados.

Los líderes condenados, entre los que se incluyen una pareja de esposos, un evangelista y ocho pastores vinculados al grupo cristiano Puerta de la Montaña, fundado en Texas y operando en Nicaragua desde 2015 bajo aprobación inicial del régimen, enfrentan una situación desesperada. Uno de ellos vive en condiciones precarias, sin electricidad y cocinando con leña, destacando el absurdo de la suma monetaria exigida.

La comunidad internacional ha reaccionado con consternación y llamados a la acción. Senadores de Estados Unidos han instado al gobierno de Joe Biden a imponer sanciones específicas y significativas en respuesta a las continuas violaciones a la libertad religiosa en Nicaragua. Además, un grupo de 58 parlamentarios estadounidenses, liderados por el congresista Robert Aderholt, ha enviado una carta al embajador nicaragüense en Estados Unidos, exigiendo la inmediata liberación de los pastores bajo el argumento de que su detención se basa en persecución religiosa y violaciones flagrantes de los derechos humanos.

Esta condena refleja un deterioro preocupante en el respeto a la libertad religiosa en Nicaragua, desencadenando una llamada urgente a la comunidad internacional para que tome medidas concretas en apoyo de los líderes cristianos injustamente castigados y en defensa de los valores fundamentales de libertad y justicia.

El caso de la dictadura contra los cristianos de Puerta de la Montaña

En 2023, con la asistencia del gobierno de Nicaragua, Mountain Gateway llevó a cabo ocho “campañas evangelísticas” masivas llamadas “Cruzadas Buenas Nuevas Nicaragua 2023”, con la asistencia de miles personas. La última se realizó el 11 de noviembre de 2023, en Managua, con más de 170 mil asistentes, cuando ya habían programadas otras 10 para este 2024.

Kristina Hjelkrem, asesora legal de ADF International y quien lleva este caso, explicó este 4 de abril a ACI Prensa que fue ese 11 de noviembre que comenzó “la persecución”, a lo que siguió con la cancelación de la personería jurídica y la confiscación de casi 5 millones de dólares en propiedades y activos de la organización, para concluir, entre el 18 y 20 de diciembre, con el arresto y encarcelamiento de los 11 líderes acusados de lavado de dinero.

La experta en derecho internacional expresó su sorpresa porque las campañas del grupo cristiano se hacían en coordinación con el régimen, que les “dio la oportunidad de poder predicar al aire libre en eventos masivos, algo que ya no le permitía a la Iglesia Católica”.

Tras señalar que en Nicaragua el gobierno ha cerrado entre 200 y 300 iglesias protestantes, Hjelkrem destacó que estos eventos se convirtieron en lugar de encuentro de quienes querían orar en espacios públicos, porque “la gente no tenía donde ir”.

Estos eventos, añadió, movilizaron “a tanta gente que el gobierno se puso en alerta y decidió acabar con Puerta de la Montaña porque lo vio como un movimiento social, aunque sabemos que es profundamente religioso y solamente religioso”.

Jon Britton Hancock, fundador y presidente de Mountain Gateway, indicó a ACI Prensa que los eventos eran “puramente religiosos. No tenemos motivación política ni estamos involucrados en política, ni en Nicaragua, ni en ninguno de los países donde trabajamos”.

“Lo que creemos de nuestro trabajo es que no somos embajadores de ningún país, sino embajadores del Reino de los Cielos y por eso nos preocupa el bien de toda la gente”, aseguró.

La abogada de ADF International también resaltó que al gobierno de Nicaragua “no le gusta que alguien tenga esta capacidad de mover gente, no le gusta ningún tipo de liderazgo”.

Sobre la acusación de lavado de dinero, la abogada destacó que el régimen de Ortega y Murillo “tenía personas que venían a auditar las cuentas mes a mes. No había ningún solo dólar que viniera de sus donantes de Estados Unidos, y que entraba en Nicaragua, que no estuviera explicado en documentos oficiales”.

La persecución de los cristianos en Nicaragua

El 17 de enero de 2024, Puerta de la Montaña conoció que el Fiscal General de Nicaragua avanzaba en la presentación de cargos contra tres ciudadanos estadounidenses asociados con Mountain Gateway, alegando lavado de dinero y crimen organizado, una acusación que el grupo niega enfáticamente.

Los acusados son Jon Britton Hancock, su hijo Jacob y su nuera Kathy, quienes no pueden salir de Estados Unidos porque Nicaragua ha emitido una alerta a Interpol, en la que solicita su extradición si se encuentran en alguno de los países adonde ha llegado el aviso.

“Tenemos distintas emociones: estamos tristes, molestos y muy preocupados por nuestra gente en la cárcel, por la falta de libertad. Esta situación es terrible”, indicó Britton a ACI Prensa.

Tras comentar que está en Washington D.C. para buscar ayuda y algún tipo de solución diplomática, el fundador de Puerta de la Montaña condenó la persecución religiosa en Nicaragua, también contra la Iglesia Católica.

“¡Es terrible! Creo que la persecución del gobierno contra cualquier grupo no es buena. Hemos visto al gobierno persiguiendo a los católicos y a sus sacerdotes; también a pastores evangélicos. No está bien y lo condenamos enfáticamente”, aseguró el líder cristiano.

Kristina Hjelkrem también narró a ACI Prensa que en los círculos evangélicos se comenta que “todos los pastores son conscientes de que existen infiltrados e informantes en sus iglesias, por lo cual no son libres de predicar en libertad porque saben que el régimen está a la espera de que se hable en contra del Gobierno de sus acciones para cerrar iglesias”.

¿Qué le diría al dictador de Nicaragua, Daniel Ortega?

A la pregunta, Jon Britton contestó a ACI Prensa que “le hablaría sobre la necesidad de defender la libertad y no su poder”.

“Haría lo mejor que pudiera para convencerlo de que detenga la persecución contra quienes lo critican; y que en vez de eso proteja la libertad de pensamiento, de elección, así como la libertad religiosa”.