Ante el recrudecimiento de la violencia y el ataque contra miembro de la fuerza pública en Colombia, la Diócesis de Apartadó, al noroccidente de Antioquia, en unión con otras fuerzas vivas de la sociedad civil del Urabá Darién, convocaron para que antes de la posesión del nuevo presidente, se realice en cada poblado y ciudad actos simbólicos de rechazo a la violencia armada y se adelanten jornadas de oración, clamando por la paz de esta región.
En un comunicado firmado por Mons. Hugo Alberto Torres Marín, obispo de la Diocesis de Apartadó, se rechaza el asesinato de jóvenes, ataques contra estaciones de policia, el cierra de establecimientos educativos y de servicios públicos, todo ellos causado por miembros del Clan del Golfo, quienes persisten con amenazas por desplazamiento, confinamiento y asesinato para el control territorial.
El prelado expresó su saludo de cercanía y condolencia a los familiares de policías y militares asesinados, así como a las instituciones a las cuales pertenecían la población en general. Aseguró su oración por toda la comunidad y les invito a no perder la esperanza.
Fuente: Conferencia Episcopal de Colombia
Redacción: Natalia Monroy