Jue. Oct 31st, 2024

El Papa Francisco se dirigió a los consagrados durante la Jornada Mundial de la Vida Consagrada y destacó su papel peculiar en la Iglesia, que proviene de un «don particular». La Misa fue celebrada por el Cardenal João Braz de Aviz y al final, el Purpurado leyó una carta del Papa. En su misiva, el Papa recordó el tema de este año, «Hermanos y hermanas para la misión», y subrayó que todos son miembros de la Iglesia y que la Iglesia está en misión desde su fundación hasta el final, impulsada por el Espíritu.

“Y en el Pueblo de DIOS, enviado para llevar el Evangelio a todos los hombres, vosotros, personas consagradas, tenéis un papel peculiar, que deriva del don especial que habéis recibido”, dijo el Papa. 

A continuación, explicó que este don “da a vuestro testimonio un carácter y un valor especiales, por el hecho mismo de que sois enteramente dedicados a DIOS y a su Reino, en pobreza, virginidad y obediencia”.

“Si en la Iglesia cada uno es una misión, todos y cada uno de vosotros lo sois con una gracia propia de persona consagrada”.

El Papa Francisco explicó que, además de “este don fundamental”, la misión de los consagrados “se enriquece con los carismas de vuestros institutos y sociedades”.

“Todos los carismas son para la misión, y lo son precisamente con la riqueza incalculable de su variedad; para que la Iglesia pueda testimoniar y anunciar el Evangelio a todos y en todas las situaciones”, defendió. 

Además, el Pontífice recordó que hoy celebramos la Presentación del Señor en el Templo y pidió “que la Virgen María nos obtenga la gracia de que nuestra vida de consagrados sea siempre una fiesta del encuentro con Cristo”.

“Queridos hermanos, estoy cerca de vosotros y os doy las gracias por lo que sois y por lo que hacéis. Rezo por vosotros y os animo a seguir adelante en vuestra misión profética”, concluyó el Papa Francisco. 


Fuente: Aciprensa