Múltiples voces de aliento de personas de todas las edades y nacionalidades se han compartido en redes sociales luego del grave accidente y las exitosas intervenciones quirúrgicas realizadas al ciclista
Admiradores, colegas, amigos, gobernantes, religiosos, periodistas, personalidades… Miles son los mensajes y oraciones elevadas por el gran Egan Bernal, campeón del Giro de Italia y el Tour de Francia. El deportista, de 25 años, chocó este lunes contra un bus mientras entrenaba por carreteras colombianas con su equipo, el Ineos-Grenadiers.
Las lesiones son preocupantes para un deportista de su categoría. El primer parte médico de la Clínica Universidad de La Sabana, donde fue atendido, indicó que tenía “trauma cervical y torácico, trauma cerrado de tórax, trauma músculo esquelético y trauma en miembros inferiores”. De inmediato fue intervenido quirúrgicamente por un equipo interdisciplinario para tratarle las fracturas en el fémur y la rótula de la pierna derecha y la perforación de un pulmón por una vértebra, a causa del fuerte golpe.
Horas después, la clínica informó que el grupo de neurocirugía realizó con éxito una intervención en la columna vertebral. A partir de ese momento empezaron a correr 72 horas que serán definitivas para su recuperación.
A primera hora de este martes 25 de enero, el centro médico informó que Egan continúa en la Unidad de Cuidado Intensivo y en los próximos días “se dará manejo a la infección y la contusión pulmonar que tuvo, para llegar a una mejor estabilidad del paciente”. En la tarde, la clínica señaló que Bernal “A medida que las horas han pasado, el paciente ha tenido excelente respuesta al tratamiento”. El joven campeón, que se preparaba en una vía del céntrico departamento de Cundinamarca, ya fue extubado satisfactoriamente, está consciente y tiene movilidad en los brazos y las piernas.
A cadenas de oración invitó Nairo Quintana, otro destacado ciclista que ha ganado el Giro de Italia y la Vuelta a España, quien prometió que “lo vamos a tener en las oraciones para que siga adelante y se levante y lo volvamos a tener nuevamente en carretera representándonos a los colombianos”.
Este joven que inspira a miles de niños y jóvenes, excelente escalador, deportista disciplinado y de un origen humilde, es también ejemplo por su fe católica en medio de las competencias. Como Aleteia lo registró en años anteriores, en su familia acostumbran a darse la bendición mutuamente y así se le vio durante el Tour de Francia de 2019, cuando en medio de las celebraciones por su triunfo, bendijo a su hermano mientras él hacía lo mismo.
Posteriormente, tuvo la oportunidad de cumplir su sueño de conocer al papa Francisco, a quien le regaló la maglia rosa que ganó en el Giro de Italia y una bicicleta con los colores de la bandera de Argentina.
“Mi familia es católica, yo soy católico, y fue algo que no me esperaba. Su presencia fue realmente increíble. Estoy muy contento”, dijo a los periodistas al terminar el encuentro, en junio del año pasado en la plaza de San Pedro, en el Vaticano.
Hoy, la confianza en Dios sostiene a Egan y a su familia y a todos quienes se han unido por su pronta recuperación y su seguro regreso a las competencias de élite.
