
El Patriarca Latino de Jerusalén, Mons. Pierbattista Pizzaballa, alentó a los sacerdotes de todo el mundo a ser «testigos valientes del Evangelio». Al presidir la Santa Misa este 5 de abril desde el Cenáculo en Jerusalén, en una ceremonia en la que sacerdotes de todo el mundo pudieron renovar el sacramento del Orden Sacerdotal, Mons. En la celebración Eucarística, realizada en el marco de la peregrinación virtual «Recorriendo la Tierra Santa de la mano de la Iglesia» del Centro Magdala, el Patriarca Latino de Jerusalén subrayó que «somos sacerdotes y ministros para el pueblo y no para nosotros mismos».
«Somos aquellos que estamos dispuestos a lavar los pies de aquellos para los que fuimos llamados», añadió. El Prelado alentó luego a que los sacerdotes se dejen «cuestionar por nuestros fieles, que tienen el derecho de ver en nosotros testigos valientes del Evangelio y signos de una vida auténtica, que habla por sí misma, y no solo a través de palabras vacías o falsas apariencias». «Como sacerdotes, efectivamente, a veces nos ocupamos de demasiadas cosas y corremos el riesgo de perder la esencia de lo que es nuestra verdadera vocación. » Mons.
Pizzaballa recordó también la importancia de la oración en la vida de los sacerdotes, pues «hay que orar mucho para que el polvo, que año con año se pega a nuestros pies, a veces cansados de caminar por senderos hechos ciertamente de tanta alegría y pasión, pero también de incomprensiones y de pobrezas, no cubra nuestras mentes». «Jesús sigue disponible a lavarnos los pies, a perdonar nuestros pecados, nuestras infidelidades, nuestras miserias. » La peregrinación virtual «Recorriendo la Tierra Santa de la mano de la Iglesia»