Mar. Abr 16th, 2024

Con el objetivo de discernir las acciones pastorales que se deben implementar en la post pandemia, varios capellanes y animadores de la pastoral universitaria participaron en un conversatorio convocado por el departamento de educación y culturas de la Conferencia Episcopal de Colombia (CEC).

 

“El Evangelio nos presenta y nos pide que interpretemos los signos de los tiempos (…) Creo que es una tarea clave, fundamental, que nos toca a todos nosotros con mucha creatividad, desde la distancia a veces, a través de estos medios virtuales”, señaló monseñor Luis Fernando Rodríguez Velásquez, obispo auxiliar de Cali y presidente de la comisión episcopal de educación y culturas.

 

Asimismo, monseñor Rodríguez insistió en que esta tarea de acompañamiento no solamente debe hacerse con el estudiantado, sino también con el personal docente, y administrativo, e, incluso, con el personal externo que presta sus servicios a las instituciones de educación superior.

 

El padre Diego Alonso Marulanda, vicerrector de la Universidad Pontificia Bolivariana, motivó la reflexión desde cuatro principios de realidad, cuatro oportunidades y cuatro retos que ha dejado la pandemia a la pastoral universitaria, ofreciendo herramientas para asumir la época de la post pandemia.

 

Principios de realidad: 

 

La pandemia ha revelado muchas formas de vulnerabilidad humana. Entre ellas “la relación” (entre nosotros, con nosotros mismos, con la naturaleza, etc.) 

Este tiempo nos sorprendió inesperadamente en medio de una sociedad del cansancio, hiperconectados, con altos niveles de consumismo e individualismo, saturados de mucha información, además de la exposición al miedo y la incertidumbre. 

Se ha evidenciado que la mayoría de niños y jóvenes estaban desconectados de la experiencia cercana del amor, que estaban muy solos, tanto en casa como en las instituciones. 

Descubrimos que los jóvenes si están abiertos a Cristo, que tal vez somos nosotros quienes debemos desbloquear ese miedo a convocarlos.

Oportunidades: 

 

Atreverse a encontrarse con los jóvenes desde la condición humana. 

Enseñar a los jóvenes la oración de Jesús en la que de manera permanente mencionaba que Él estaba en el Padre y el Padre en Él. 

Motivar a los jóvenes para que vivan en una lógica del don, de la gratuidad. Que descubran la lógica de lo sencillo y lo simple. 

Si los jóvenes están abiertos a Cristo, hay que llevarlos con la experiencia y el testimonio al encuentro personal con el Señor. Nuestra pastoral tiene que ser ‘kerigmática’.

 

Retos: 

 

Construir cultura del encuentro. 

Alcanzar altos niveles de amor propio. 

Lograr resignificar la capacidad humana. 

Acercar a los jóvenes a la Eucaristía y la Sagrada Escritura.

Uno de los grandes compromisos de este encuentro virtual es la propuesta de realizar un conversatorio a partir de las experiencias vividas por las instituciones durante este tiempo, destacando la importancia de mantenerse juntos, alimentar permanentemente la fe, acercarse a Dios para superar la incertidumbre y el miedo, ser creativos en la difusión de contenidos y abrir espacios de interacción con todos los miembros de la comunidad educativa.

 

Como tarea del encuentro quedó la invitación de monseñor Luis Fernando Rodríguez a elaborar una publicación con todas las experiencias vividas. “Me atrevo a sugerir que a través de la RUC (Red de Universidades Católicas), pudiéramos hacer una publicación de todas estas experiencias que ustedes han tenido. Tenemos que decir que la Iglesia ha hecho acciones en la pastoral, que hemos aportado con acciones concretas”, puntualizó el obispo.

 

Fuente: Conferencia Episcopal de Colombia
 
 

 

 

 

 
Nota enviada por Teresita González a webmaster