El pasado 25 de septiembre, Paraguachón corregimiento a 8 km al oriente de Maicao y ubicado en el Departamento de La Guajira, fue escenario del Encuentro Binacional en la frontera Colombo-venezolana, evento que se realizó en el marco de la 108 Jornada Mundial del Migrante y el Refugiado.
Inicialmente, como acto simbólico y muestra de unidad territorial, monseñor José Luis Azuaje, arzobispo de Maracaibo, y monseñor Francisco Antonio Ceballos, obispo de Riohacha, portaron una luz y sal, que luego de ser bendecidas, las intercambiaron como signo de hermandad y atendiendo el llamado que nuestro Señor Jesucristo hace de ser “sal de la tierra y luz del mundo”.
El acto congregó a más de 700 personas de ambos países, habitantes de la localidad y sitios aledaños, delegaciones de Pastoral Social de Colombia y Cáritas Venezuela. Así también, asistieron la primera dama de Maracaibo, Vannesa Linares, y el Alcalde de Maicao, Mohamad Dasuki, quienes aplaudieron estos actos de hermandad coordinados por la Iglesia católica.
El prelado resaltó que estamos llamados a construir -lo que el Papa ha dicho- la Jerusalén terrestre, para llegar a la Jerusalén del cielo, es decir, “una ciudad donde haya paz, concordia, amor y solidaridad, donde todos los seres humanos nos reconozcamos como hermanos”.
Fuente: Conferencia Episcopal de Colombia
Redacción: Natalia Monroy