Mié. Abr 24th, 2024
Monseñor Miguel Cabrejos, Arzobispo de Trujillo (Perú) y Presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) envió un video-mensaje con motivo de la Pascua de Resurrección, en nombre de los obispos del continente.  

Monseñor Cabrejos recordó, “Tu Cruz adoramos, Señor, y tu santa resurrección alabamos y glorificamos; por el madero ha venido la alegría al mundo entero”, y, el testimonio de los primeros discípulos: “proclamemos que el sepulcro está vacío, la piedra ha sido movida; aquel que sufrió la pasión, que fue crucificado y murió en la cruz, ¡HA RESUCITADO! ¡ha vencido a la muerte! Es el que vive (Ap 1,18)”.

https://youtu.be/iIrxxG8L1UI
Fuente del video: Celam

Asimismo, Monseñor Cabrejos destacó que “el eco de este acontecimiento que surgió en Jerusalén hace más de 20 siglos, continúa resonando en la Iglesia, que lleva en el corazón la fe vibrante de María, la Madre de Jesús, la fe de la Magdalena y las otras mujeres que fueron las primeras en ver el sepulcro vacío”.

Precisamente “esta es la gran novedad que la Iglesia no se cansa de proclamar a través de los siglos, esta novedad es el corazón del mensaje que ha difundido en todos los rincones de la tierra”.

 

Una Iglesia ministerial y sinodal

 

A todas estas “el Concilio Vaticano II ha generado una nueva autoconciencia de Iglesia. Y el CELAM invita con más ahínco a transitar hacia una Iglesia como Pueblo de Dios en diálogo y al servicio al mundo; una Iglesia sacramento del Reino de Dios en la historia; una Iglesia sinodal”.

 

De este modo, el CELAM reafirma su compromiso por “una Iglesia comunión, toda ella ministerial; una Iglesia ‘abogada’ de los pobres y misericordiosa”, donde “todos podemos sentirnos acogidos, amados, perdonados y alentados a vivir según la vida buena del Evangelio” (EG 114)” como también “una Iglesia pluricultural, inculturada en la interculturalidad; una Iglesia pobre y para los pobres; samaritana y profética (cf. EG 198)”.

 

“Pido al Señor que en esta hora nos haga experimentar la alegría de su luz, la luz del Resucitado, representada en el cirio pascual, y pidámosle que nosotros mismos seamos portadores de su luz”, acotó.

 

 

Fuente 1: Vatican News
Fuente 2: CELAM