Con el fin de rechazar la Ley Orgánica de Modificación de la Ley de Educación (LOMLOE), también conocida como Ley Celaá, miles de personas realizaron manifestaciones en Madrid y otras ciudades de España para manifestar su Inconformidad. Las manifestaciones fueron convocadas por la Plataforma Más Plurales, las cuales hicieron énfasis en seguir las medidas de seguridad.
La Ley de Educación fue aprobada inicialmente el pasado 19 de noviembre y continúa su trámite en el Senado en los próximos meses. La Plataforma Más Plurales considera aún tienen tiempo de cambiar esta Ley que es contraria a las libertades constitucionales y que, además pone en peligro el futuro laboral de miles de trabajadores de la enseñanza concertada, de los centros de educación especial y del profesorado que imparte la asignatura de Religión en los centros públicos.
“Ha llegado el momento de dejar claro que no toleramos los límites ni recortes a nuestra libertad de enseñanza, porque en ella nos jugamos la educación de nuestros hijos y el futuro de nuestra democracia”, aseguraron los integrantes de la Plataforma Más Plurales
De igual manera “Somos conscientes de que la pluralidad de la escuela de hoy, es la base de la democracia de la sociedad del mañana, por eso defendemos la complementariedad de las redes pública y privada-concertada. No admitimos que la LOMLOE permita a las autoridades educativas imponer la distribución del alumnado, tampoco la planificación arbitraria de la administración por encima de la necesidades reales de escolarización manifestadas por la familia”, concluyeron
También “denunciamos que a través del control político de la educación, estamos asistiendo a una agresión a la libertad de conciencia a favor de la imposición de una ideología laicista impropia de un Estado no confesional”.
Frente a la asignatura de Religión, dijeron que “es una opción mayoritaria de las familias españolas que la eligen libremente cada año y cuya voluntad debe ser respetada”.
¿Quiénes conforman la Plataforma Más Plurales?
“En la Plataforma Más Plurales participan más de 260 mil profesionales, docentes y no docentes que ven peligrar la continuidad de sus centros y sus puestos de trabajo; cerca de 4 millones de familias a la que se les limita el derecho a elegir el tipo de educación que quieren o que mejor se adecúa a las necesidades de sus hijos.
Más de 3 millones de alumnos eligen voluntariamente, en centros de titularidad pública y privada, cursar la asignatura de Religión; así como más de 9.300 centros de la red concertada y privada que ven peligrar la continuidad de sus proyectos educativos”.
Fuente: Aciprensa
Nota basada en información de Aciprensa
