Mié. Abr 17th, 2024

“Mi orden utilizará toda la fuerza del gobierno federal para impedir las prácticas inhumanas de la terapia de conversión”, dijo Biden durante la firma de la orden ejecutiva, calificando de “peligrosa y desacreditada” cualquier tipo de terapia o asesoramiento que no afirme la homosexualidad y la transexualidad. La orden ejecutiva ordena al Secretario de Estado que desarrolle un plan de acción para combatir la terapia de conversión y “promover el fin de su uso en todo el mundo”, incluso aprovechando la ayuda exterior de Estados Unidos -es decir, condicionando el apoyo económico a otra naciones a que prohiban esas terapias- y promoviendo iniciativas contra la “terapia de conversión” en las Naciones Unidas. con varios funcionarios y organismos de la ONU que recientemente han hecho campaña contra la llamada “terapia de conversión”. La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, la chilena Michelle Bachelet, calificó hace unos días las terapias de conversión de “abuso de los derechos humanos”.

 

El término “terapia de conversión” no se refiere a un método establecido de terapia o asesoramiento. Es una etiqueta despectiva aplicada por políticos y activistas LGTBI a cualquier forma de terapia de conversación o asesoramiento para ayudar a las personas a lidiar con la atracción por el mismo sexo o la disforia de género no deseadas. Los psicólogos que llevan a cabo este tipo de terapia de conversación dicen que los resultados se basan en la motivación del paciente y su voluntad de cambiar sus pensamientos y acciones. Los críticos de este tipo de terapia conversacional dicen que causa daños.

 

La orden ejecutiva también ordena a las agencias federales que luchen contra la terapia de conversión a nivel nacional y que desarrollen estrategias para erradicarla, junto con otras políticas para promover la aceptación social de la homosexualidad y la transexualidad en el sistema de justicia, las escuelas, la atención sanitaria, así como la policía y las agencias gubernamentales.

 

 

Fuente: Infocatólica

Redacción: Natalia Monroy